viernes, 26 de marzo de 2010

Cuaderno de Tipografía.

"Para la gente es fácil tenerle miedo a la gente que no conoce. Porque no sabes nada de ellos ni de qué son capaces. Pero, y aunque eso es cierto y totalmente plausible, al final y ayer, me di cuenta de que siempre le tengo más miedo a la gente que conozco. Porque sé precisamente de lo que son capaces. Sé sus vidas y sus errores, su pasado. Y por conocerlos y conocer sus vidas, conozco precisamente los agujeros en sus historias. Esos sin explicar. Y todo eso, más los secretos, conocer la mecánica de sus cabezas, sus ideales, sus miedos, sus deseos más profundos y desquiciados, más las vueltas de chaqueta que alguna vez pudiera notar; los hace más temibles que a un desconocido cualquiera. Los hace menos confiables. Los hace, en el fondo, alguien de quien más se le debe tener miedo.

Sobretodo si uno confía. Porque cuando te fallan o traicionan o te dejan atrás, uno lo cuenta. Uno lo registra.
Y esas marcas son mucho más difíciles de quitar.
Y a veces, hasta se comen todo lo bueno que existió antes de eso".

-Cuaderno de Tipografía. Martes, 23 de marzo 2010. 9:48am.

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